Así a priori, si no has leído nada, lo más seguro es que estés pesando en el Empire State Building como el observatorio más emblemático de Nueva York. !Y estás en lo cierto!

Mucho se habla de que este edificio no ofrece las mejores vistas de la gran manzana pero, qué quieres que te diga, sigue siendo el más famoso, el más cinematográfico y no hay quien le baje del pedestal a pesar de las nuevas incorporaciones.
Nosotros hemos subido a los tres observatorios más importantes: El Empire State Building, El Top of the Rock (En el Rockefeller Center) y por supuesto, la más reciente incorporación: El One World Observatory, el más alto del hemisferio norte.
Empecemos!

El Empire State Building / Precios
El precio por adulto es de 41 dólares y 38 para los niños. Los bebés entran gratis. Sin embargo, podrás ahorrarte un dinerillo si compras alguna de las tarjetas turísticas que ofrece NYC. Aunque eso sí, la única que incluye visita al Empire es la New York Pass (pero esta no incluye la entrada al One World Observatory)
La experiencia en el Empire
Se vive desde el minuto uno. Justo abajo, en el hall, ya puedes ver una maqueta impresionante del edificio. Pero antes de subir a la terraza, irás descubriendo algunas curiosidades sobre su construcción y podrás saludar, como no, a su «inquilino» más célebre. El famoso gorila King Kong.

Nota: En todos los observatorios (y mayoría de atracciones de NYC) te obligarán a pasar por una especie de plató con un croma* en donde te harán una fotografía que se cobra al final de la visita. Esto no es ni mucho menos obligatorio. De hecho, nosotros posamos la primera vez pero en las sucesivas, pasábamos totalmente e íbamos directamente a lo que nos interesaba.

¿Qué se ve desde el Empire State Building?
Al ser el segundo más alto (solo por detrás del One World Observatory) ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad. De hecho, desde el Empire puedes ver el propio edificio del World Trade Center. También el nuevo edificio que se está construyendo en la zona de Hudson Yards y por supuesto, dos de los rascacielos más bonitos de la ciudad: El edificio Flatiron y el Crysler. He hecho, este último se ve mucho mejor desde el Empire State que desde el Top Of the Rock.
Tù ve apuntando para hacerte la comparativa porque si tuvieras que elegir a cuál de ellos subir, no te creas que es nada fácil.


Veamos lo mejor y lo peor de este Observatorio:

¿Puedes subir con un bebé y la sillita?
Por supuesto que sí. El único problema es la falta de espacio. Aunque para salir a la terraza exterior del Empire State Building el edificio cuenta con rampa de acceso, es tan estrecho y suele haber tanta gente, que digamos que no es lo más cómodo para ir con una silla infantil.
Cuando hablemos de los otros observatorios que hemos visitado, seguramente saldrás de dudas sobre cuál de ellos es más accesible.




¡Atención papis!
Otra cosa a tener en cuenta es que el Empire State Building no cuenta con cafetería por lo que intenta no subir con mucha hambre.
Y esto es directamente para los papás con niños pequeños que lleven sillita:
Prácticamente en todos los museos y por supuesto también en los observatorios, deberás plegar la silla de paseo y pasarla por el scáner. Te lo digo para que tengas en cuenta no llevar cosas en la cesta inferior de la silla ya que tardarás bastante en pasar el control. Es mejor que lo lleves todo en una bolsa o mochila para que puedas plegar la silla con facilidad.
Nota para amantes de la fotografías y bloggers:
En ninguno de los tres observatorios principales de la ciudad se permite el uso de trípodes.